"Mandanos tu sueño", una convocatoria del Museo Rojas en tiempos de cuarentena
Huerta urbana agroecológica en el Museo Casa de Ricardo Rojas
El Museo Casa de Ricardo Rojas presenta la huerta agroecológica construida en colaboración con la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) y como parte del proyecto de accesibilidad “Voces de la Casa”. Se trata de la la primera huerta urbana agroecológica de un Museo Nacional en la ciudad de Buenos Aires.“Voces de la Casa”, en el Museo Rojas
Se trata de un proyecto de accesibilidad para repensar el discurso museográfico y construir un nuevo relato más inclusivo y diverso.La convocatoria forma parte del Proyecto de Accesibilidad Voces de la Casa, que toma como bandera la inclusión, la diversidad, el afecto y lo humano. Cada acción que surge de este proyecto el Museo la trabaja en conjunto con la Asociación Civil Lengua Franca y distintas personas e instituciones para que la comunicación de la misma sea accesible.
El escritor Ricardo Rojas mandó construir su casa
con una idea: somos una fusión
entre pueblos indígenas y pueblos europeos.
Él llamó a esa fusión Eurindia.Pero pasaron muchos años ya.
Personas cada vez más diversas vivimos en la misma ciudad
Por eso queremos reconstruir el Museo Ricardo Rojas
con nuevas miradas, ideas y sueños.Mandanos un sueño desde tu casa.
Contanos cómo te gustaría que sea el mundo,
la relación entre las personas,
o la relación con la naturaleza.
Todos los deseos que reciban los transformarán en alimento. Interesados en incorporar vida al museo, mediante la construcción de una huerta agroecológica se busca sensibilizar acerca de la biodiversidad, la ecología, la presencia de los pueblos originarios y la importancia de la soberanía alimentaria.
Soñamos con un museo para oler, sentir, tocar y dejar una huella.
La huerta, al ser un patrimonio vivo, permite seguir ampliando horizontes y derribando fronteras a través de distintos programas públicos que irían desde talleres y charlas de alimentación saludable, el uso de plantas medicinales, la construcción de huertas y compost hasta ofrendas a la Pachamama.
También se incluye el abordaje del trabajo de la tierra desde una perspectiva de género.
“Quisieron enterrarnos, pero no sabían que éramos semillas”, es una frase feminista que motiva a pensar en la idea de deseo y sueño como germinador del futuro. En la construcción de la huerta hay una idea de resistencia y de deseo de transformación, cuentan en el Museo.
"Como museo, somos guardianes del patrimonio y de la historia, pero también nos interesa abrirnos al presente. Incorporar los deseos y sueños de hoy, y hacerlos germinar, es una manera de visibilizar las luchas actuales que habitan en nuestro territorio".
Cómo participar
Copiaremos tu sueño en un papel reciclado con semillas. Plantaremos ese papel en el jardín y las semillas se transformarán en plantas. Cuando volvamos a las calles y abramos el museo, podrás visitarlo y ver la planta que creció con tu sueño.