Tomás Ballicora: “La cultura es sanadora en cualquier instancia”

En tiempos de pandemia, también la cultura se ha puesto al servicio de la salud. Desde el Ministerio de Cultura de la Nación, por ejemplo, Tecnópolis -además de haberse convertido el año pasado en el centro más grande del país para pacientes leves de COVID-19-, hoy está funcionando como una de las tantas postas vacunatorias que ha inaugurado el Estado Nacional. Por su parte, el Centro Cultural Kirchner (CCK) -en articulación con los Ministerio de Salud y Defensa- se unió desde el mes pasado a la batalla contra el coronavirus, cediendo gran parte de su espacio para el mismo fin de vacunación.

Actualmente, cuenta con ocho puestos vacunatorios en los que se aplican hasta mil dosis diarias y en los que trabajan 60 personas entre personal administrativo, de salud y logística. Pero esto no es todo: la cultura, tanto en Tecnópolis como ahora también en el CCK, dijo presente en infraestructura pero también en arte. 

Al respecto, el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, comentó: "La vacuna es nuestro horizonte de esperanza. Entonces, sentimos que es un lugar donde los artistas tienen que estar presentes llevando su arte a todas las personas que concurren con la esperanza puesta en un futuro mejor".

Y es que quienes se dirijan al CCK para recibir las dosis contra el coronavirus podrán disfrutar de un momento de música en vivo. Allí, se reencontrarán con músicos de distintos elencos para escuchar desde cuartetos de cuerdas, tríos con piano, interpretaciones de obras clásicas, adaptaciones de melodías famosas de todos los tiempos, hasta canciones de rock y otros géneros de músicos populares y nacionales. De esta manera, la breve espera para vacunarse no solo se hace más agradable, sino también reconfortante y transformadora mediante la música.

Desde la premisa de que la cultura y la salud pueden dialogar, conversamos con el programador de música académica del CCK, Tomás Ballicora, quien nos cuenta más sobre esta experiencia artística y musical, en tiempo de pandemia.

-Ya desde la antigua Grecia hay una concepción catártica que puede producir el arte. Incluso, en los mitos de Orfeo, se habla de la música como sanación de cuerpo y alma. ¿La idea de incluir interpretaciones musicales en el contexto de vacunación surgió con esa perspectiva?

-La cultura es sanadora en cualquier instancia. La propuesta surgió a través de una idea del ministro de Cultura, Tristán Bauer, bajo la premisa de que estas intervenciones artísticas cumplen una doble función: alimentar el espíritu y el alma de todas y todos los que concurren a los vacunatorios y, además, revalorizar el rol fundamental de nuestros artistas en estos tiempos.

-¿Con qué repertorio se encuentran quienes se vacunan en el CCK? 

-Queremos garantizar una grilla diversa. El repertorio y las formaciones son variadas: podemos encontrar desde cuartetos de cuerdas o tríos con piano que interpretan obras clásicas y arreglos y adaptaciones de melodías famosas de todos los tiempos, hasta canciones de nuestros músicos populares nacionales. Está pensado específicamente para que sea una experiencia reconfortante.

-¿Cada día es una propuesta musical distinta? 

-Las formaciones van rotando en los turnos de mañana y tarde. Cada semana se renueva la propuesta, está pensada de manera variada, con una amplia diversidad de músicas y músicos y formaciones. 

-¿Qué músicos o integrantes de bandas u orquestas participan de las interpretaciones? 

-Entre los artistas, hay músicos contratados para este fin. Tratamos de incluir especialmente a aquellos más afectados económicamente por la pandemia. Los músicos han visto muy acotadas sus posibilidades de trabajo durante este tiempo.

-¿Hay respuestas o devoluciones de los públicos asistentes, antes y después de la vacunación?

-Los músicos se encuentran en dos momentos en el proceso de vacunación: uno, cuando las personas esperan para ingresar; y otro, cuando deben esperar unos minutos después de recibir la vacuna. Se genera un clima interesante, emotivo. Para alguien que recién recibió la vacuna, escuchar música puede ser muy emotivo; también para los artistas, porque es una posibilidad de reencontrarse con el público en un escenario tan imponente como el CCK. Después de muchos meses de inactividad, ser parte desde la música en este proceso tan importante de la vacunación adquiere otro valor.