Ser mujer afrodescendiente en Argentina, hoy
Ser mujer afrodescendiente en Argentina, hoy

Ser mujer afrodescendiente en Argentina, hoy

Cuatro referentes nos cuentan sobre la actualidad de la mujer afro, sus resistencias, luchas y conquistas
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El 25 de julio de 1992 mujeres negras de 32 países de América Latina y el Caribe se reunieron en República Dominicana para hacer visibles las luchas y resistencia de las mujeres afro y definir estrategias de incidencia política para enfrentar el racismo desde una perspectiva de género. A raíz de ese encuentro, se instituyó el 25 de julio como Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente, también conocido como Día de la Mujer Afrolatina, Afrocaribeña y de la Diáspora.

Desde hace más de 500 años que hombres y mujeres de origen africano habitan el territorio que hoy es la Argentina  (lee la nota El origen afro de la Argentina). Durante el siglo XIX se quiso constituir como una nación blanca y homogénea creando el mito de la desaparición de la población afrodescendiente producto de las guerras y la fiebre amarilla. Pero las y los hijos de los esclavos y de las diversas migraciones que comenzaron a partir de 1920 están en las calles, en los pueblos, en las ciudades del país y son hoy las mujeres organizadas quienes alzan la voz para erradicar las violencias raciales que perviven desde la época de la colonia, y visibilizar y combatir las desigualdades étnicas, económicas y sociales, que se agrandan y se expanden sobre las mujeres afrodescendientes.

Las protagonistas

Denise Brazão, Lisa Montaño Ortíz, Lisset González Batista y Colleen Fitzgerald son mujeres, artistas, profesoras, periodistas, activistas, investigadoras afrodescendientes que viven en Argentina.  Como un rompecabezas, van reconstruyendo sus historias, entretejiendo opiniones sobre el patriarcado, la desigualdad étnica, las conquistas, luchas y desafíos que comparten las mujeres afro en todos los puntos del planeta.

Denise Brazão

Nació en Mina Gerais, Brasil. Es la primera en su familia que logró acceder a la universidad. Hoy es magister de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, rompiendo con el rol asignado por generaciones a las mujeres de su familia: el de ser empleadas domésticas.

“Ser mujer afro es resignificar, es resistir  y luchar contra las tres cosas que oprimen: las desigualdades de género,  las étnico-raciales y de clase. Todos los días nos tenemos que rehacer de los racismos que sufrimos, de las miradas agresivas, del maltrato de la gente en la calle, de que te digan “no” cuando buscas trabajo por ser mujer negra migrante". Denise Brazão


(Denise Brazão)

Lisset González Batista

Es docente y licenciada en estudios culturales y especialista en género y comunicación. Nació en Cuba y está convencida de que la educación es la herramienta para romper con los preconceptos, estereotipos y falsas creencias que se asignan a la imagen de las mujeres afrodescendientes.

"En los espacios "normales", donde la sociedad se desenvuelve, es difícil ver a una mujer negra, incluso en los centros laborales que no sean restaurantes ni trabajos domésticos o de servicios a otras personas. Siempre sus lugares están relacionados con la servidumbre. Este es uno de los desafíos que enfrenta la mujer afrodescendiente. Poder ubicarse en sus lugares laborales atendiendo a su capacidad intelectual, hay muchas que no están donde tendrían que estar. Cuesta mucho atravesar esa barrera de racimo estructural, porque es un racismo que está institucionalizado, o “casi legislado”, porque pasa por la subjetividad de las personas que están en los puestos de toma de decisiones, de no permitir, de no dejar que las personas negras puedan acceder a puestos acordes a su capacidades. Y por supuesto, a todo eso lo atraviesa el tema del patriarcado, del sexismo y la discriminación racial que existe". Lisset González Batista.


(Lisset González Batista)

Lisa Montaño Ortíz

Nunca se imaginó que obtendría un título universitario como periodista. Nació en Cali, Colombia, en una familia muy humilde sostenida por mujeres. Vive en Argentina hace ocho años y en 2017 recibió el premio Lola Mora por transmitir una imagen positiva de la mujer negra libre de los estereotipos de género, promover la igualdad de oportunidades y derechos.

“Estoy radicada en la Argentina hace siete años y aún debo explicar mi cabello y mi cuerpo. Aún sigo siendo la única en las aulas de clase. Aún no hay periodistas afrodescendientes en los medios de comunicación que no tengan una participación estereotipada y grotesca. Puede parecer increíble, pero aún muchos creen que solo estamos dadas para el servicio o complacer al hombre o para el folclor. Cuando eres profesional, cuando ocupas espacios que antes nos fueron negados y sabes expresar tu ideas y defiendes tu postura, eso no cae muy bien. Muchos se rehúsan a aceptar que la actitud de sumisión no esté implícita en una mujer negra. Y la mujer afro siempre fue fuerte, luchadora, dirigente, trabajadora y defensora de sus derechos”. Lisa Montaño Ortíz.


(Lisa Montaño Ortíz)

Colleen Fitzgerald

Su madre nació en Liberia y es la primera generación de migrantes. Colleen es ciudadana estadounidense y en 2012 se mudó a Argentina para desarrollar su carrera artística. Las artes escénicas la apasionan y sus obras remiten a sus orígenes africanos y a las mujeres que marcaron su vida: su abuela, su madre, sus hermanas y luchadoras como Angela Davis o Nina Simone.

"Los prejuicios y estereotipos abundan en todos los espacios que atravesamos, lo experimenté durante toda mi formación en el contexto de la universidad. Todos los profesores son blancos, y lo que aprendes no reflexiona sobre tu cultura. La historia de los afro está excluida en la universidad". Colleen Fitzgerald.


(Colleen Fitzgerald)

Sobre el feminismo

“El término feminismo fue creado por mujeres de clase media, blancas, europeas. Me interesa que el feminismo tenga en cuenta las especificidades de la mujer negra, de la historia de lucha de la mujer negra. La mujer negra ha estado históricamente en una posición aún más desventajosa por el hecho simple de la esclavitud, y ha sido víctima de explotación, vejaciones y humillaciones. Es importante tener en cuenta esta especificidad: de dónde venimos, cómo hemos sido tratadas por la historia y cuál ha sido nuestro papel". Lisset González Batista

“Estamos resignificando la palabra, porque existen muchos feminismos y perspectivas distintas. El feminismo es una palabra que abarca la lucha en favor de mejoras para el género, y si pensamos de esa manera estamos dentro de un contexto de lucha de género, pero también de  un contexto de lucha étnico racial. La academia, la política son espacios de poder blanco, entonces nosotras nos preguntamos muchas veces qué espacios nos pertenecen. Y ese espacio que nos pertenece es todo y al mismo tiempo nada, porque hay un rechazo de la presencia del cuerpo de la mujer afro, que es un cuerpo estigmatizado, más que el cuerpo del hombre afro. Es un cuerpo híper sexualizado, entonces muchas veces cuando estamos en un espacio político, como por ejemplo una academia o un debate, muchas veces somos minimizadas o nos interpelan desde este lugar “ustedes son lindas, no deberían estar acá, deberían ser modelos". Nosotras estamos luchando para tener ese el lugar, ese espacio en esa gran arena de poder. Queremos hablar por nosotras, queremos estar y decidir sobre nuestros cuerpos y no queremos que nuestras compañeras blancas decidan por nosotras tampoco. Ese es el espacio que estamos reivindicando: un feminismo que sea anti racista y anti xenofóbico"Denise Brazão.

Las conquistas

"Las mujeres negras cada vez más han alzado sus voces. Hay un interés por que no sean los otros los hablen por nosotras. Siempre hubo una situación problemática para las mujeres y para las personas negras en general, que es el estar atravesadas por la invisibilización y el silenciamiento de nuestra historia. Hoy existe una reivindicación que nos convoca a contar nuestra historia, a hablar de nuestra experiencia con nuestras propias voces, me parece que eso ha sido uno de los logros que hemos obtenido y por los cuales hay que seguir luchando"Lisset González Batista.

"En Buenos Aires las mujeres afros nos estamos encontrando. Estamos intentando recuperar nuestras raíces y nuestras historias. Nos reunimos y esos encuentros nos curan cuando podemos hablar de nuestras problemáticas con nuestras compañeras, intercambiar y pensar juntas propuestas de políticas afirmativas, pensar juntas propuestas para mejorar nuestras condiciones laborales y educacionales. Este grupo está creciendo cada día y somos un punto de referencia para otras mujeres afro, un punto de encuentro y un punto de resistencia en la Ciudad de Buenos Aires". Denise Brazão.

"Nosotras estamos visibilizando lo que el Estado no ha querido. Estamos organizadas, preparadas y capacitadas para desempeñarnos en cada esfera de la sociedad. Estamos resignificando a nuestros ancestros y sacando a la luz sus nombres, su vida y obra. Que en el CENSO 2010 se haya incluido la variable afro es muy importante para saber cómo está conformada hoy la negritud residente en el país. Si bien sabemos que estamos aquí, los descendientes de los/as esclavizados, los/as hijos de migrantes y las corrientes migratorias voluntarias, necesitamos cifras concretas"Lisa Montaño Ortíz.

"Mi mudanza a la Argentina tiene mucho que ver con una decisión de reconocerme y trabajar mis raíces afro en un país donde estas raíces están invisibilzadas. La estética  argentina tiene mucho de la mirada blanca y europea. Mi arte intenta revindicar la cultura afro, desde nosotras, mujeres afrodescendientes haciendo arte sobre nosotras y ocupando espacios con ese arte". Colleen Fitzgerald.

"Lo fundamental es insistir en la educación de las personas, porque siento q hay mucho desconocimiento, desinterés, muchos preconceptos errados en el imaginario y el inconsciente colectivo. Me parece que de la mujer afro se sabe muy poco, que hay un halo de preconceptos, estereotipos y falsas creencias que son muy difíciles de quitar en una sociedad como la argentina, donde se parte de la premisa de que no hay negros, lo que es una falsedad total. Porque si hubo esclavitud africana, necesariamente hubo descendencia. Los afrodescendientes, las mujeres afrodescendientes y afroargentinas estamos acá, caminando por las calles y aunque les pese a algunas personas, Argentina también es afro". Lisset González Batista.