Raquel Stöck, especialista en danza terapia: "No existen cuerpos que no puedan danzar"
Raquel Stöck, especialista en danza terapia: "No existen cuerpos que no puedan danzar"

Raquel Stöck, especialista en danza terapia: "No existen cuerpos que no puedan danzar"

Danza
Accesibilidad
¿Qué es la Danza Movimiento Terapia Vincular? Raquel Stöck explica este tratamiento que promueve la apertura del cuerpo sintiente, poniendo el foco en la danza con apoyatura del Sistema de Análisis de Movimiento, de Laban Bartenieff.
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La Danza Movimiento Terapia Vincular (DMTV) es una especialidad que se vale del movimiento para promover la integración emocional, cognitiva y física del individuo. Pertenece al grupo de las artes creativas en psicoterapia como el arte terapia, la musicoterapia y el psicodrama.

Se caracteriza por el uso del movimiento y la danza para promover procesos de prevención, promoción de la salud, calidad de vida e integración psicofísica del individuo. Reconoce la complejidad y riqueza de la realidad, y desestima los reduccionismos y las falsas dicotomías que escinden las relaciones cuerpo-mente, acción-reflexión, intelecto-emoción.

Las ciencias, así como el arte, se debaten hoy por encontrar un paradigma del conocimiento humano que supere el concepto restringido de la racionalidad moderna, en el cual tengan cabida los nuevos campos disciplinares nacientes que, si bien se encuentran en proceso de construcción, establecen sus bases sobre saberes sólidamente establecidos. Dicha complejidad requiere abordajes interdisciplinarios y una visión centrada en la salud y no en la enfermedad, en las potencialidades y no en las discapacidades, reconociendo los aportes histórico-sociales y culturales que los atraviesan.

Por ende la DMTV se fundamenta en la utilización de la danza como el medio artístico y expresivo elegido para la realización de un trabajo que promueva la salud.

Sobre Raquel Stöck

Es especialista en Psicología vincular en familias con niños/niñas jóvenes y adolescentes. Es mediadora familiar, docente invitada de la Universidad CAECE / Formación Cefid San Pablo, Brasil/Asociación "Atelier Marais" Paris, Francia, y miembro de la Asociación Argentina de Danza Terapia. En esta materia, ha ejercido la Presidencia de la Institución y trabajado con adultos con dolor crónico en el Hospital Tornu, con padecimiento psíquico en Hospital de Día Prosam y con ancianas en el Hogar Guereño. Ha escrito para la revista Kiné, para las publicaciones de la AADT y publicó Danza MovimientoTerapia Vincular.

-¿Cómo surge Danza Movimiento Terapia Vincular?

-Las creaciones son producto de múltiples influencias. Es decir, aparecen siempre en "el medio". En el caso de Danza/Movimiento Terapia Vincular, surgió como entramado de diferentes saberes que promueven la apertura al cuerpo sintiente, poniendo el foco en la danza con apoyatura en el Sistema de Análisis de Movimiento Laban Bartenieff, principios de psicología vincular, escritura creativa, artes plásticas y la efectiva concreción de los derechos humanos personalísimos. Porque así como no existiría el derecho si no hubiera "cuerpos", no existen cuerpos que no tengan derechos. ¡Y no existen cuerpos que no puedan danzar!

Defino a la Danza Movimiento Terapia Vincular como un proceso psicoterapéutico acontecimental que, poniendo el foco en el movimiento, está presente a lo que ocurre en un encuentro entre las singularidades múltiples, produciendo nuevas conexiones deseantes y promoviendo la integración de la dimensión bio/ ¿psico/social/ambiental de los seres humanos.

-¿A quiénes están dirigidos los talleres?

-Los talleres están dirigidos a todas aquellas personas que quieran recuperar la estética de vida. El tránsito se realiza desde lo experiencial/teórico. Y si bien concurren psicólogos, docentes de diferentes disciplinas, trabajadores sociales, sociólogos, psicopedagogos, psicomotricistas, también concurren personas que no tienen ningún "título", dado que lo único que se requiere es el deseo de abrirse a la potencia que habita en los cuerpos sintientes en movimiento.

¿Cuál considera que es el papel de la danza en la accesibilidad?

Todos podemos danzar, porque la danza es la vida misma, la danza es movimiento y el movimiento es vida. No hay límite de edad ni de condición. Danzar es escuchar el deseo de libertad y ponerlo en movimiento desde la ética del cuidado y de los derechos humanos.

-Entendemos por danza el modo único y singular que tiene cada persona de expresarse en movimiento con sentido a la vitalidad. ¿Es así?

-Podría decir que el recorrido de vida me fue llevando a abogar cada vez más por la necesidad de reactivar la potencia del movimiento sentido, la dimensión empática y la dimensión del arte como modos de pronunciarnos en la vida, y las afectaciones producidas en el encuentro con otras personas y/o disciplinas, devinieron en la creación de Danza/ Movimiento Terapia Vincular que se despliega facilitado por un equipo de expertos en estas disciplinas y aunados por la experiencia y la convicción de la fuerza transformadora de la danza.

La sabiduría del cuerpo en movimiento en el encuentro con un otro es ancestral. Se danzaba como modo de cortejo, de celebración, de pasajes de un estado de vida a otro, para expresar emociones intensas, para pedir la lluvia, para las cosechas, antes de las guerras, implorando la paz y así en infinidad de situaciones que ponían de relieve una alianza ritual danzada entre los humanos y sus dioses.

Luego la danza constituyó un arte reservado a aquellos que desarrollaban algún grado de disposición para la misma aprendiendo técnicas y formándose para ello.

La posguerra

Fue recién luego de la Segunda Guerra Mundial cuando surgió por primera vez Danza/ Movimiento Terapia, ante la evidencia de que el movimiento en el encuentro con otro resultaba sanador. Es decir, cuando otros lenguajes terapéuticos –como la psicología o la psiquiatría- no alcanzaban para reparar cuerpos arrasados, violentados, vulnerados, esas presencias sufrientes constituyeron un estímulo muy fuerte que llevó a médicos de un hospital en Washington a la convicción de que algo había que hacer con ellos. Y llamaron a una bailarina que era intuitiva y empática: Marián Chace.

Y de ese encuentro, de ese conmoverse, de esa empatía kinestesica desplegada en situación, habitada en presencia, en tiempo y espacio, sosteniendo lo incierto, se abrió un modo nuevo, una línea de fuga, una trama que se tejió en los bordes, ahí mismo donde los saberes instituidos no llegaban, ahí mismo donde había que inventar, esperar, crear de un modo paciente y sutil, con la singularidad que aparecía: así nació danza/movimiento terapia. La danza, entendida como la singularidad del movimiento de cada quien -y no como virtuosismo-, devino en una forma terapéutica con un cuerpo teórico propio inserta en el paradigma de la complejidad.


Hoy la disciplina está extendida en muchísimos lugares del mundo, y en Argentina es una disciplina muy joven aún. La singularidad de Danza/Movimiento Terapia Vincular es la mirada vincularista, la de los derechos humanos personalísimos desde una ética del cuidado, y la apertura al cuerpo vibrátil, que deviene cuerpo poesía, cuerpo arte.

Compartimos huellas de la corporalidad en movimiento incluyendo el sonido, la voz, la palabra poética, el color, y damos cuenta de las afectaciones y efectos del movimiento en espacio y tiempo, facilitando un proceso de integración. Estos otros territorios de existencia a otros posibles conectan con la potencia de vida que habita en los cuerpos, mi cuerpo, tu cuerpo, nuestros cuerpos, y esa potencia de vida se manifiesta en movimiento. De este modo nos emancipamos en situación y esas emancipaciones constituyen un acto político.

Cuando compartimos la sensibilidad creadora de los cuerpos a través de la plástica y la poesía, lo hacemos desde un espacio que hospeda el despliegue de los afectos. ¡Desde ahí creamos! Y crear es entrar en la vida misma.



Propiciamos la generación de movimientos sentidos, deconstruyendo y desresponsabilizando el cuerpo obediente que porta el cuerpo cotidiano, para pasar a habitar cuerpos a la escucha, cuerpos creativos, cuerpos solidarios, cuerpos en continuo devenir. Nuestros cuerpos son muchas veces portadores y reproductores de movimientos anclados en el estereotipo impuesto por el mercado de consumo.

Dicho de otro modo, poder salir de esa captura y producir un registro del movimiento con sentido a la vitalidad en el encuentro con un otro, desde esa vibratilidad sintiente y sentida, es abrirse a la creatividad. Experiencia esta que desplegamos desde el movimiento en la plástica, la poesía, la palabra.



El dispositivo DMTV produce efectos en nuestros modos de vida y aún más, desde la singular creatividad de cada uno, lo llevamos a otras prácticas: por ejemplo, hogares de ancianos, nińos, escuelas, clínicas de rehabilitación, consultorios terapéuticos, adultos con temáticas específicas, hospitales de día. ¡Es maravilloso lo que realiza en cada uno la potencia de la danza! Danza que a veces es simplemente con las manos, o sentados en una silla cuando la posibilidad es esa. Trabajamos y danzamos con lo que hay. ¡No con lo que falta!

Entendemos que, si somos habitantes de un mundo en transformación viviendo en medio de afectaciones que nos ponen de relieve lo incierto, la invitación más que nunca es a dejar de lado pretender construir falsas certidumbres, y ponernos en la línea de la vida misma, que es la línea del movimiento, y la danza nos regala esa experiencia de lo múltiple, lo singular, descentrado, transversal y rizomático que produce en cada uno experiencias integradoras y fortalece los lazos sociales construyendo entre todos un mundo más humano.



-¿Cómo han sido los resultados de los asistentes a los talleres y al módulo de formación?

-Ha sido una experiencia muy transformadora. Tanto para los que asisten a la formación para ser luego terapeutas del movimiento, ya que la formación es experiencial/teórica, como para los que realizan seminarios y/o encuentros de DMTV.

De hecho, actualmente durante la cuarentena, desde una perspectiva solidaria y a fin de cuidarnos entre todos, estamos ofreciendo encuentros virtuales gratuitos de DMTV y los terapeutas del movimiento egresados de la primer camada de la Formación, están acompañando a personas de diferentes edades y en distintos puntos geográficos del país con resultados muy alentadores y que hacen mucho bien. Acompañan desde DMTV a personas de más de 90 años hasta niños pequeños.



La danza es un dispositivo valiosísimo para utilizar a cualquier edad, en cualquier estado de vida y sobre cualquier población, ya que permite desplegar un lenguaje universal: el lenguaje de los cuerpos en movimiento. Por ello es un aporte en la educación, facilitando el aprendizaje, en el área de salud, posibilitando otros tránsitos, en recuperación de situaciones de violencia física y/ o emocional, en padecimiento psíquico, adicciones, enfermedades mentales, crisis vitales, separaciones, duelos, pérdidas y en el fortalecimiento de los lazos sociales.

Ese camino de integración en continuo devenir que propicia la danza, lo expresó bellamente Nietzsche cuando dijo: "Danzamos sobre los pies del azar, donde espacio y tiempo se conjugan. Las fuerzas simbólicas se desencadenan y crean un nuevo orden simbólico en movimiento. Los símbolos se integran".

-¿Qué mensaje le gustaría dejar en el Día Internacional de la Danza?

Hoy es el día de todas y todos. Danzar es otra forma de decir la vida, es el lenguaje de los cuerpos en movimiento. Mientras hay vida, ¡hay movimiento! Dancemos.

Fotos: Facebook Danza/ Movimiento Terapia Vincular