Murales contra la Violencia Institucional en la Casa de las Juventudes

El Ministerio de Cultura de la Nación, a través de la Dirección Nacional de Diversidad y Cultura Comunitaria, de la Secretaría de Gestión Cultural, en articulación con la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputados de la Nación y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, está realizando una serie de murales patrimoniales para visibilizar la temática de Violencia Institucional en todo el país, fomentando el debate, el conocimiento y la participación en el proyecto de Ley Integral contra la Violencia Institucional presentado en el Congreso de la Nación. 

La inauguración fue parte de una jornada orientada a la participación juvenil, que se realizó en la Casa de Juventudes, ubicada en el barrio porteño de Devoto, un espacio del Instituto Nacional de Juventudes (INJUVE), dependiente de Jefatura de Gabinete de Ministros.

Participaron Tristán Bauer, ministro de Cultura de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, secretario de Derechos Humanos de la Nación, Macarena Sánchez, directora del Instituto Nacional de Juventudes, Maximiliano Uceda, secretario de Gestión Cultural, Juan Esteban Buono, director Nacional de Diversidad y Cultura comunitaria, Laura Bianchi, directora de Acción Federal y Violeta Mirano, coordinadora de la Casa. También estuvieron la diputada nacional Paula Penacca, impulsora del proyecto de ley, la legisladora Lucía Cámpora, otras autoridades de INJUVE, los y las muralistas, y representantes de Madres en Lucha.

La obra realizada de manera colectiva, diseñada por las artistas Carina Monasterio y Karina Vargas, puede verse en la fachada de La Casa de Juventudes, un espacio abierto a las y los jóvenes, dedicado al abordaje de temáticas que atraviesan la vida de las juventudes como orientación y acompañamiento laboral, cursos de formación para el trabajo, asesoramientos en las trayectorias educativas, talleres culturales y recreativos, abordaje en cuestiones de géneros y diversidad sexual, derechos humanos y promoción del deporte, dirigidos a jóvenes de la zona, y también de la provincia.

En articulación con distintos organismos nacionales, se llevan adelante talleres y diversas acciones que apuntan a una concientización ciudadana sobre el respeto por los derechos humanos y de cuidado hacia los y las jóvenes, quienes suelen ser más vulnerados/as en sus derechos y sufrir estas violencias, acompañadas de la estigmatización social y dirigida generalmente a los sectores más desprotegidos. Estas acciones permiten visibilizar y hacer partícipe a la sociedad para seguir reflexionando sobre los actos de violencia y las prácticas ilegales contra los Derechos Humanos que se siguen ejerciendo por parte de las fuerzas de seguridad.

El Ministro de Cultura de la Nación destacó el rol que cumple la cultura para la sociedad:

“Esto que empezamos a hacer hoy, lo vamos a hacer todos los días, en esta reconstrucción que tenemos por delante vamos a poner toda la fuerza y toda la energía. Qué importante es la educación y la cultura, no la cultura que baja de arriba sino la de los pueblos haciendo cultura, la de los jóvenes creando. Pero sabemos perfectamente que la cultura es sanadora”.

Habló también acerca de las actividades que se pueden realizar en la Casa: talleres de radio, danza, literatura, música, redes para crear y trabajar el territorio digital.

Alentó a las y los jóvenes a la reconstrucción de un nuevo mundo después de la pandemia:

“El mundo post pandemia tiene que ser distinto, lo sentimos y lo expresamos siempre, la juventud tiene un rol central y fundamental, desde esas ideas jóvenes, desde esas ideas nuevas es que vamos a poder reconstruir. El compromiso es desde el Ministerio de Cultura con lo que tenemos y con las cosas que tengamos que inventar. Ese es el desafío, creemos en esto, ése es nuestro compromiso verdadero, a partir de ahora, así como pusimos toda nuestra energía en la salud, y en lo que denominamos: “mantener encendida la llama de la cultura” en dar becas, ayudas, colaboraciones para este sector que fue tan golpeado no perezca que sobreviva y lo logramos mantener. Ahora tenemos que crecer y avanzar”.

Por  su parte, el Secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, afirmó que al igual que las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, las Madres en Lucha tienen el objetivo de “erradicar la problemática de la violencia institucional, concientizar y sobre todas las cosas, que los casos que suceden no queden impunes” y agregó que “en eso estamos acompañando, y para que eso suceda, debe haber mucho sentido común en la sociedad: se tienen que saber cuáles son los derechos, y no se tienen que naturalizar” estos hechos.

Pietragalla concluyó:

“Los mecanismos internacionales que defienden los Derechos Humanos, por el ejemplo el Comité contra la Tortura Internacional, dicen que si sale esta ley va a ser de vanguardia en el mundo, así que es importantísimo el avance que estamos teniendo, y no hubiéramos podido tener este avance si no hubiera habido un 2003, si no hubiera llegado Néstor, si no se hubieran acabado las leyes de impunidad y obediencia de vida, si no hubiéramos empezado a condenar a los genocidas”.

Una representante del colectivo Madres en Lucha agradeció la presencia del Estado y compartió su testimonio de lucha:

“Gracias porque el Estado está presente, porque cuando asesinan a tu hijo las fuerzas de seguridad del Estado, no creés en nada ni en nadie. Nosotras aprendimos a creer porque conocimos a un hombre: ése hombre fue Néstor Kirchner. Nosotras que perdimos a nuestros hijas/os nos fuimos organizando, fuimos reclamando en cada juicio, en cada marcha con cada cartel acompañando a las Madres, a los Hijos, a cada nieto recuperado. Aprendimos que las luchas no son individuales, la lucha es por todos ustedes, que no son el futuro, son este presente de lucha, son ustedes los que vana a transformar esta realidad, son ustedes los que están peleando por la cultura, por el trabajo, por la música, por el deporte, esos son los derechos de ustedes y que nosotras reivindicamos y acompañamos. Lo que le pasó a nuestros hijos no queremos que le pase a ningún joven más, que ninguna fuerza de seguridad del Estado se lleve la vida de nuestros pibes. Por eso luchamos y por eso nos organizamos y creamos Vida en cada lugar. Por eso decimos que este dolor lo hemos transformado en lucha, por eso nos llamamos madres en lucha y acompañamos cada lucha de nuestro pueblo”.

Al final de la jornada jóvenes artistas compartiendo música y poesías, mientras otros y otras daban las últimas pinceladas al mural incorporando la imagen de los pañuelos blancos de las Madres de Plaza de Mayo, todo respetando los cuidados y protocolos vigentes.