Encuentro Iberoamericano sobre Desarrollo de Audiencias: cuál es la diferencia entre público, audiencias y comunidades
Encuentro Iberoamericano sobre Desarrollo de Audiencias: cuál es la diferencia entre público, audiencias y comunidades

Encuentro Iberoamericano sobre Desarrollo de Audiencias: cuál es la diferencia entre público, audiencias y comunidades

El 15 y 16 de agosto en el Centro Cultural Recoleta, especialistas reflexionarán sobre los cambios en los hábitos de consumo cultural
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¿Cuál es el rol de los diferentes públicos en la formación de experiencias culturales? ¿Y el de quienes trabajan en organizaciones culturales? ¿Qué tipos de públicos, audiencias y comunidades se construyen? Estos y otros temas son los que se plantearán distintos expertos nacionales e internacionales, en el Encuentro Iberoamericano sobre Desarrollo de Audiencias - PAC: públicos, audiencias, comunidades –que se realizará el 15 y 16 de agosto, en el Centro Cultural Recoleta–, para reflexionar sobre los cambios de hábitos sociales y culturales, formas de pensar, y modos de producir, crear y elegir.

Ya lo decía el filósofo francés, Jacques Rancière –en su libro El espectador emancipado–, quien cuestionaba, por ejemplo, la oposición entre mirar y actuar: el espectador siempre es activo, por lo tanto, observa, selecciona, compara e interpreta; es él quien construye a su modo lo que otro transmite. Entonces, ¿cuál es el rol que le proporcionan las instituciones y organismos –si es que lo hacen– para participar de las experiencias estéticas y culturales?

Con público presente, el Encuentro Iberoamericano PAC abrirá un espacio de debate para contribuir al desafío que enfrentan quienes abordan la cultura como un campo de construcción; y a las organizaciones, como posibles contextos de transformación social e interpersonal. La idea es descifrar un poco más qué se entiende por público, audiencia o comunidad, sus diferencias, si pueden formarse o construirse desde determinados parámetros socioculturales, la relación formal entre políticas culturales nacionales y regionales para trabajar con cada grupo social, entre otras cuestiones.

“Aproximadamente, podríamos convenir que audiencias es una expresión más propia de las industrias creativas y que describe a las personas o grupos de personas que realizan algún tipo de consumo cultural no-presencial, donde el grado de implicación es indirecto (industria audiovisual y musical); públicos alude a los espectadores presenciales de disciplinas artísticas que se definen a partir del encuentro de la obra con las personas en un tiempo o espacio determinados (teatro, danza, ópera), y comunidad corresponde a la gestión de implicación de públicos que comparten un interés común en torno a las artes y que como resultado de ese interés impulsan proyectos propios en distintas líneas. Últimamente se ha ampliado la reflexión sobre estos temas no solo desde el marketing cultural o a partir de los estudios sobre Audience Development, sino desde la reflexión que genera el modelo de sociedad actual”, explica el periodista y crítico chileno, Javier Ibacache Villalobos, quien estará presente en como disertante, en el Centro Cultural Recoleta.

Su coterráneo Felipe Mella Morales, arquitecto y gestor cultural –también estará presente en el debate–, agrega: “Cuando hablamos de desarrollar públicos o formarlos no estamos refiriéndonos a incidir en superponer nuestros gustos o criterios, estamos más bien preocupados de aportar como agentes al desarrollo de su capital cultural y hábito de consumo. Traigo a colación el tema del acceso, pues es importante recordar que la formación de públicos busca, en primera instancia, romper barreras asociadas con el campo de recepción simbólico de una experiencia en cultura”.

Por otra parte, sobre la relación con los tipos de públicos, audiencias y comunidades, ¿es posible “construirlos”? ¿Con qué fin? Mella Morales explica: “Podemos abordar, por ejemplo, a los públicos desde un marco territorial (vecinos) o edades (niños, tercera edad). Se construyen, en ocasiones, perfiles de públicos también de acuerdo con sus parámetros de consumo cultural. El fin de segmentar estos grupos es claramente responder de mejor manera a las necesidades individuales de cada uno de ellos. No hay una estrategia única en el trabajo con las audiencias así como no hay un solo tipo de audiencias a trabajar”. Ibacache Villalobos señala: “Es interesante observar cómo entidades que responden a estructuras canónicas han ido abriéndose y adaptándose a este nuevo escenario, como museos y teatros de ópera. O bien, cómo centros culturales regionales consideran en su diseño estratégico planes o programas orientados a los públicos. Dado que los contextos establecen diferentes desafíos y presentan condicionantes específicas, la orientación de cada estrategia es particular y lo que puede inferirse son orientaciones generales. Una de ellas corresponde al rol que este ámbito de proyectos puede tener en la generación de una ciudadanía crítica respecto de su entorno y eventualmente más comprometida con las artes y la cultura”.  

Y, en cuanto al rol de los diferentes públicos en la formación de experiencias culturales, concluye: “El rol de los públicos es vital en cuanto son parte de la experiencia cultural. No existe el concepto de la recepción o articulación de una experiencia estética sin alguien que la disfrute. La pregunta, más que sobre el rol de los públicos, está a mi parecer puesta en el rol de los centros culturales y espacios articuladores de estas experiencias, ¿qué rol le estamos dando nosotros a nuestros públicos en la participación?”.

Por su parte, Ibacache Villalobos opina: “En la gestión cultural, es usual que se hable de la categoría "público general" para referirse a un conjunto indiferenciado de espectadores o comunidades a los cuales se orienta la labor de un espacio o una programación determinada. Pero como lo subraya la antropóloga Lucina Jiménez, no existe el público general sino ‘los públicos’. Mientras más específicos seamos en el establecimiento de objetivos, más consistente será el resultado de las estrategias que llevemos a cabo. Por ello es necesario tener parámetros de segmentación funcionales al plan que estemos impulsando, y conocer en profundidad a los públicos.

Necesitamos saber qué piensan, qué valoran, qué consumos culturales tienen, a qué causas adhieren, qué los predispone negativa o positivamente frente a lo que les proponemos, y qué buscan cuando se vinculan o participan en la programación o las actividades que hemos diseñado”.

En el Encuentro, también estarán presentes otros destacados referentes de la gestión cultural, entre ellos: Ana Rosas Mantecón (México), Valentí Oviedo y Carlota Álvarez Basso (España), Patricia Pieragostini (Argentina), Marta Porto (Brasil) y Adriana Tamariz (Ecuador), junto con gestores culturales argentinos.