Biblioteca sobre ruedas: una forma de acercar la lectura a todos los rincones
Biblioteca sobre ruedas: una forma de acercar la lectura a todos los rincones

Biblioteca sobre ruedas: una forma de acercar la lectura a todos los rincones

Letras
Infancias
En Salta Capital, en pleno corazón de las barriadas de la zona oeste, la Biblioteca Popular Palermo se prepara para salir a rodar y convidar lecturas por las plazas.
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Las bibliotecas populares, semillero de lectores
Un día como hoy, hace 121 años, nacía el escritor argentino Jorge Luis Borges. En su recuerdo, todos los 24 de agosto se celebra en nuestro país el Día del Lector. Como un regalo para los amantes de la lectura, las bibliotecas populares recomiendan títulos y cuentan historias de sus territorios de palabras.

Hasta el mes de agosto, Salta era una de las provincias menos afectadas por el coronavirus. Reuniones de hasta diez personas, comercios habilitados, actividades deportivas al aire libre eran algunas de las actividades permitidas en el marco del aislamiento social preventivo y obligatorio. En ese contexto, las y los coordinadores de la Biblioteca Popular Parlermo comenzaron a dar forma a una idea que hace tiempo venían masticando: la biblioteca sobre ruedas.

“Durante la cuarentena vimos que los niños pasaban muchas horas dentro de sus casas frente a internet o, en otros casos, sin acceso a la red, lo que dificultaba su continuidad educativa. Como en este momento la biblioteca está cerrada, se nos ocurrió la idea de poder acercarnos y convocarlos, con todas las medidas sanitarias correspondientes, a espacios al aire libre para que puedan disfrutar de diferentes talleres de lectura y actividades culturales”, cuenta Gabriela Cardozo, directora de la biblioteca.


La Biblioteca Popular Palermo nació hace 26 años en el barrio Palmeritas, compuesto por los planes de vivienda Palermo I, II y III. La biblioteca forma parte de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares y es uno de los espacios comunitarios de referencia en el barrio. Es un punto de apoyo donde los y las vecinas se acercan a despejar dudas, a dar una mano, a charlar un rato. Durante la semana se desarrollan diferentes actividades culturales, entre ellas, talleres de costura, encuentros de tejido, merendero, y talleres recreativos para niños y niñas que se coordinan con diferentes instituciones: jardín de infantes, bomberos, escuelas, comedores.

En la iniciativa "Bibliotecas sobre ruedas" los años de desarrollo comunitario se ven reflejados en cada uno de los pasos que contribuyen a poner en marcha el proyecto: desde la coordinación de la biblioteca miraron fotos durante horas hasta elegir el modelo de bicicleta ideal para que un vecino, herrero y soldador, ponga manos a la obra. Las mujeres que participan de los talleres de corte y confección cosieron almohadones para poder utilizar en los talleres en las plazas, jóvenes voluntarios están seleccionando los materiales de lectura y planificando las actividades recreativas, y los niños, ansiosos, preguntan a cada rato cuándo llega la "bicicleta de libros".

"En principio, los talleres en las plazas de los barrios van a estar orientados a niños y adolescentes, pero pensamos en ampliarlo a un público adulto más adelante. Ahora las actividades que estamos planificando son talleres de narración oral, espacios de lectura, taller de títeres, concurso de dibujos, sorteo de libros", comenta la directora.


Modelo de biblioteca sobre ruedas que eligieron como modelo. Biblioteca ambulante en Budapest.

"Nos parece importantísimo que la biblioteca genere diferentes formas de acercamiento y de promoción de la lectura. Poder tener un vehículo acondicionado para llevar nuestros libros, revistas, lecturas y materiales educativos por todas las plazas de nuestros barrios cercanos. Nuestos recursos son limitados pero queremos ponerlos a disposición de la comunidad y generar, desde la lectura, un espacio de integración", concluye.

Las bibliotecas ambulantes son una de las experiencias más atractivas de lectura que se han desparramado por el mundo tomando las más diversas formas. A principios del siglo XX, durante la Guerra Civil española, el “biblio-bus” recorría las pueblos afectados por los enfrentamientos; en Francia, el “Biblio-tren” se acercaba las familias ferroviarias que no podían acceder a las instituciones educativas. Las bibliotecas sobre camellos en África o el “biblio-burro” en Colombia son experiencias que perduran y llegan a lugares impensados para ir al encuentro y compartir con las comunidades la experiencia fantástica de sentarse a leer.

En Argentina, la “Biblio-lancha” que recorre el delta del Tigre ha servido de inspiración para proyectos similares en zonas costeras de Chile y Colombia. En Rosario, “La Cachilo te cuenta” se instala en las veredas de los barrios y asentamientos más diversos con sus talleres, músicas y pirámides de libros.

Este 2020, en medio de una crisis planetaria, una nueva biblioteca ambulante sale a andar por las barriadas salteñas para convidar sus ruedas de lecturas.

 

Foto portada: Biblioteca ambulante (1927) -Public Library of Cincinnati & Hamilton County