Cinco libros para acercarse a la obra de Manuel Puig

Nacido el 28 de diciembre de 1932 en General Villegas, Provincia de Buenos Aires, su pueblo se convertiría en el escenario de sus primeras novelas y, a su vez, estas le darían un nombre entre los  escritores argentinos más notables de su generación.

Con una visión marcadamente cinematrográfica y folletinesca, Puig logró tomar distintos elementos de la cultura popular para realizar una obra única y personal. En este sentido, la ensayista Graciela Speranza, autora de Manuel Puig. Después del fin de la literatura (2000), comentó en una entrevista: "Se trata del único escritor argentino de las últimas décadas que ha podido resolver un elemento característico de la literatura de los dos últimos siglos: la tensión entre novela popular y novela experimental. Se podría pensar que el pop también ha conseguido resolver esa tensión, aunque los historiadores digan que las vanguardias fracasaron porque terminaron en el museo y no lograron borrar las fronteras entre el arte y la vida".

En su libro, Speranza compara la literatura de Puig con el arte pop, en relación con ciertos procedimientos y estrategias de creación. Así como Andy Warhol o Roy Lichtenstein produjeron piezas con las que intentaron borrar la marca personal del autor, el escritor argentino "intentó sustraer su presencia del texto mediante la reconstrucción de voces anónimas". Es decir, en ese corrimiento de autor, en tanto efecto narrativo, hay una suerte de reelaboración de las voces populares y otros lugares comunes.

"Fue una decisión teórica hacer esta comparación, pero eso no significa que Puig la haya convalidado explícitamente. El simple paisaje del arte-pop en torno suyo durante los '60 autoriza esta conexión y permite ver que hay algo que sucede por esos años en el arte, una libertad que que él capta y de la que se beneficia su literatura", agregó Speranza. Y compartió: "El valor agregado de esta analogía era resolver de una vez por todas esta famosa discusión acerca de si hay o no parodia en Puig. Uno lee Boquitas pintadas y sabe que, por detrás del despliegue experimental, hay una mirada muy dura sobre la sociedad provinciana argentina y una recuperación de todo el habla popular".

A lo largo de la literatura de Manuel Puig, hay cuestiones que se repiten como la complejidad de los lazos y las relaciones presentes en determinados sectores de toda sociedad; el uso de la primera persona; algunos tonos dramáticos, y todo siempre redactado con un lenguaje coloquial y cotidiano. Puig, dicen los que saben, no fue un escritor que quisiera demostrar erudición. En este sentido, y sin obviar diferencias, estaba más cerca de la narritava de Juan José Saer, que de la de Borges o Cortázar, por ejemplo.  

Por otra parte, hay quienes dicen que aquel lenguaje cinematográfico se debe a un primer acercamiento con el mundo del cine. Puig trabajó en distintas filmaciones como asistente de director, tanto en Italia como en la Argentina. En sus inicios, había comenzado a redactar un guion fílmico, pero al segundo día se dio cuenta de que estaba escribiendo una novela. A partir de ese momento, publicó ocho obras literarias y cuatro teatrales.

Defensor de la libertad sexual y política, durante la última dictadura militar argentina tuvo que exiliarse en México y nunca más regresó. En ese país, falleció hace treinta años, el 22 de julio de 1990, en la ciudad de Cuernavaca. Pero su legado literario continúa siempre vivo, al que lectores de todo el mundo siguen llegando año a año para sorprenderse y describir en Puig una escritura sensible sobre el comportamiento humano con estilo más que propio.

Cinco libros de Manuel Puig:

1. LA TRAICIÓN DE RITA HAYWORTH (1968)
   Fue su primera novela y cuenta la historia de una familia de clase media que vive en un pueblo de La Pampa en los años '40. El paisaje de La Pampa, que en realidad es la ausencia de todo paisaje, resulta una pantalla en blanco donde cada uno proyecta las fantasías que quiere. Ahí un chico que no puede aceptar la realidad por sentirla hostil cambia los términos y toma como realidad a la ficción, ya sea la ficción del cine o la que le dicta su propia imaginación.
   
2. BOQUITAS PINTADAS (1969)
   La acción de esta segunda novela transcurre entre 1935 y 1960, y el autor asegura que los personajes están inmersos en “una atmósfera gardeliana”: habla de la relación de un hombre con tres mujeres. La obra está contada a través de diálogos directos, cartas, diarios íntimos, expedientes y publicaciones, habiendo un mínimo de narración convencional. Fue llevada al cine por el director argentino Leopoldo Torre Nilsson en 1974.
   
3. EL BESO DE LA MUJER ARAÑA (1976)
   Prohibida por la dictadura militar, esta novela relata la historia de dos presos que conviven en la misma celda, uno político y otro homosexual. Fue incluida en la lista de las 100 mejores novelas en español del siglo XX del diario español El Mundo, debido al espíritu revolucionario para la época. En 1985, fue llevada al cine por el director Héctor Babenco.
   
4. PUBIS ANGELICAL (1979)
   Primero fue la novela, que cuenta la historia de Ana, una mujer enferma internada en una clínica y, a través de su vida amorosa, hace referencia a la vida argentina de las décadas de 1960 y 1970. Es una de las primeras menciones de la literatura a las madres de la Plaza de Mayo. En 1982, se estrenó la película de Raúl de la Torre protagonizada por Pepe Soriano, Graciela Borges y Alfredo Alcón. La banda sonora estuvo a cargo de Charly García.
   
5. SANGRE DE AMOR CORRESPONDIDO (1982)
   Fue la primera de las últimas novelas que sitúa en Brasil -lugar en el que vivió en 1980. Transcurre en Cocotá, un pequeño pueblo en el estado de Río de Janeiro. Una vez más Puig habla sobre el rol de la mujer en la sociedad y las vicisitudes a las que está expuesta. La novela cuenta la historia de Maria da Gloria, que tiene 15 años, es virgen, e integra una familia italiana, con todo lo que ello puede significar respecto de la profunda vinculación que se establece entre el honor familiar y la conducta sexual de cada una de las mujeres de la casa.