Estancias Jesuíticas, 20 años como Patrimonio Mundial
Estancias Jesuíticas, 20 años como Patrimonio Mundial

Estancias Jesuíticas, 20 años como Patrimonio Mundial

Museos
A veinte años de la Declaratoria de la UNESCO como Patrimonio Mundial, las Estancias Jesuíticas celebran con una programación especial los días 17, 18 y 19 de diciembre.
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El director de la Estancia de Jesús María – Museo Jesuítico Nacional, que integra la lista de Patrimonio Mundial, habla en esta entrevista sobre la dimensión social del museo. Además, repasa las acciones llevadas adelante en sus tres años de gestión y explica la importancia de revalorizar el itinerario cultural de la región.

La Estancia de Jesús María - Museo Jesuítico Nacional y el Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia y Casa del Virrey Liniers son museos nacionales dependientes de la Dirección Nacional de Museos de la Secretaría de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura de la Nación. Las dos instituciones forman parte del sistema de Estancias Jesuíticas de Córdoba, integrado también por las Estancias de Caroya, Santa Catalina y La Candelaria. 

En diciembre del año 2000, el sistema de Estancias Jesuíticas de Córdoba fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. En 2010, con el objetivo de identificar los sitios de memoria relacionados con la esclavitud en Córdoba, rescatar el aporte cultural africano y reconocer la raíz afrodescendiente de nuestra sociedad, se formó el Grupo Córdoba La Ruta del Esclavo. En reconocimiento de este trabajo, en 2014 la UNESCO declaró a la Manzana Jesuítica y a las Estancias Jesuíticas de Córdoba Sitio de Memoria de la Esclavitud.

En diciembre de 2020 se cumplen veinte años de la declaratoria de las Estancias Jesuíticas como Patrimonio Mundial. Para celebrarlo, se diseñó una programación que se desarrollará del jueves 17 al sábado 19 de diciembre en cinco espacios culturales ubicados en diferentes localidades de la provincia de Córdoba. Las propuestas incluyen exhibiciones artísticas, proyectos curatoriales, inauguraciones de obras de restauración de los patrimonios edilicios, charlas, lecturas y conciertos.

Estancia de Jesús María - Museo Jesuítico Nacional

La programación central fue elaborada en colaboración por la Estancia de Jesús María - Museo Jesuítico Nacional y el Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia y Casa del Virrey Liniers, con el apoyo de la Dirección Nacional de Museos, dependiente de la Secretaría de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura de la Nación. Además, desde de la Secretaría de Desarrollo Cultural del Ministerio de Cultura de la Nación, a través de la Dirección de Innovación Cultural y el Programa Casas de la Historia y la Cultura del Bicentenario, se articularon acciones para que las Casas de Colonia Caroya, Las Varillas y Quilino participen de la conmemoración con diferentes actividades. 

Como espacios culturales públicos de circulación de saberes, estas instituciones son plataformas de participación colectiva, capaces de promover diferentes formas de apropiación del pasado y de lo patrimonial en sentido amplio. Invitamos a las comunidades locales a sumarse a las celebraciones por los veinte años de las Estancias Jesuíticas como Patrimonio Mundial. 

Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia


Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia y Casa del Virrey Liniers

Av. Padre Viera esq. Solares 5186, Alta Gracia, Córdoba.

El Museo se encuentra en una antigua residencia del siglo XVII que integró el casco de la Estancia Jesuítica Alta Gracia. En aquella época, Córdoba era la sede religioso-administrativa de la Provincia Jesuítica del Paraguay, que comprendía partes de los actuales territorios de Paraguay, Uruguay, Argentina, Brasil y Bolivia. Conformaba una red económica, social y cultural que constituía uno de los centros de desarrollo más destacados de Sudamérica. Además del papel que desempeñó en el período jesuítico, este edificio alojó importantes acontecimientos históricos. Uno de ellos fue, el 16 de abril de 1830, la firma del Pacto de Alta Gracia, tratado de paz, amistad y comercio entre Córdoba y San Juan que representa un antecedente de nuestra formación como país.La residencia de la Estancia fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1941. En 1968, cuando había sido reconocida como bien de interés público, el Estado la expropió y dio origen a un intenso trabajo de investigación histórica y arqueológica acompañado por tareas de restauración. En 1977 se inauguró oficialmente como Museo Histórico Nacional de la Casa del Virrey Liniers.

Estancia de Jesús María - Museo Jesuítico Nacional

Pedro de Oñate 246, Jesús María, Córdoba

La Estancia de Jesús María fue fundada por la Compañía de Jesús el 15 de enero de 1618. Allí se cultivaban vides y trigo; se criaba ganado y se elaboraba vino. Con el trabajo de aborígenes y de esclavos y esclavas provenientes de África, que posibilitó el aumento de la producción, más nuevas compras y donaciones, se amplió la extensión de la propiedad. La producción vitivinícola, característica de esta Estancia, dio lugar a dos tipos de vino: uno común de mesa, que se bebía en el Colegio Máximo de Córdoba y otras estancias (como Alta Gracia o Candelaria), y otro llamado “lagrimilla”. Hacia mediados del siglo XVIII, la producción alcanzaba los 12.000 litros anuales.

Tras la expulsión de la Compañía de Jesús en 1767, las posesiones de Jesús María fueron administradas por la Junta de Temporalidades, hasta que, en 1775, la Estancia fue rematada y comprada por el mendocino Don Félix Correas. A partir de entonces, permaneció en manos de esa familia y sus descendientes y herederos, hasta que se la hipotecó, a comienzos del siglo XX. 

La Comisión Nacional de Museos y Monumentos y Lugares Históricos la rescató del abandono al declararla Monumento Histórico Nacional, el 14 de mayo de 1941, debido a su alto valor histórico y arquitectónico. Tras la declaratoria comenzaron las obras de restauración y reparación edilicias. 

En 1945 la Comisión solicitó a la Compañía de Jesús que formara y donase una colección para armar allí un museo en conmemoración de “la acción de la Compañía de Jesús en el Río de la Plata y en otras regiones de América”. La tarea se encomendó a tres renombrados sacerdotes jesuitas: P. Guillermo Fürlong, P. Pedro Grenón y P. Oscar Dreidemie, quien se convertiría en el primer director del Museo.

Museo Nacional de la Posta de Sinsacate

Camino Real 2819, Córdoba. 

El Museo Rural Posta de Sinsacate es una construcción de piedra y adobe que se encuentra sobre el antiguo Camino Real. Fue uno de los principales paraderos del norte de Córdoba para quienes recorrían ese camino y necesitaban descansar, alimentarse y dar de comer a los caballos o cambiarlos. La Estancia de San Pablo, devenida en Posta, vendía alimentos, mulas, bueyes y carretas, y tenía molino y acequias para riego. Además, contaba con su propia capilla para que los viajeros pudieran asistir a misa. Después de la Revolución de 1810, la posta prestó servicios a los ejércitos nacionales. Allí se detuvieron los generales Manuel Belgrano, Juan Lavalle, José de San Martín y otros próceres que lucharon por la independencia nacional. En 1835 adquirió notoriedad porque el cuerpo del caudillo riojano Juan Facundo Quiroga permaneció en su interior durante unas horas tras su asesinato, en Barranco Yaco. En la actualidad conserva piezas originales de aquella época que son testimonio de la vida rural.

Las Casas de la Historia y la Cultura del Bicentenario de Colonia Caroya, Las Varillas y Quilino, espacios culturales de órbita municipal dependientes de la Dirección Nacional de Innovación Cultural, Secretaría de Desarrollo Cultural, también formarán parte de la celebración. Fueron creadas para democratizar el acceso a los espacios artísticos, culturales y de formación en todo el país, y coproducen actividades con el Ministerio de Cultura de la Nación. 

La Manzana y Estancias Jesuíticas de Córdoba fueron declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO porque conforman “ejemplos excepcionales de un vasto sistema religioso, político, económico, legal y cultural”, donde convergen los legados de jesuitas, pueblos originarios y personas africanas esclavizadas.