El teatro premió al teatro
El teatro premió al teatro

El teatro premió al teatro

La Asociación Amigos del Teatro Nacional Cervantes otorgó los premios María Guerrero 2015.

Pasaron algunos minutos de las 18. El hall del majestuoso Teatro Cervantes, completamente iluminado, huele a limón. El perfume proviene de una de las tres barras apostadas en los extremos del salón, preparadas para recibir a los invitados. El barman de ocasión es Sebastián Alderete (consagrado campeón nacional), quien en septiembre representará a la Argentina en el Mundial de Bartender en Japón. Por ahí cerca pasa Arturo Puig, con un saco con pitucones, que llegó temprano acompañando a su mujer, Selva Alemán, nominada a Mejor Actriz Protagónica por Madres e hijos. Son los primeros en pisar la alfombra roja (más bien bordó), por la que, en minutos más, desfilarán los mejores del teatro comercial e independiente, a ojos de los jurados Rómulo Berruti, Rosa Celentano, Jorge Lafauci, Juan Lavanga, Linda Máximo, Luis Mazas, Mónica Ottino, Camilo Sánchez, Ana Seoane, Agustina Villanueva (en representación de la Cancillería Argentina), Rosa Vita Pelegrín (en representación de la Oficina Cultural de la Embajada de España) y Carlos Llorens (coordinador del Premio).

De a poco van llegando los ternados. Iván Moschner —nominado a Mejor Actor Protagónico por Los hombres vuelven al monte— es otro de los tempraneros. Edgardo Moreira —quien compite en la misma terna por El invernadero— recorre la muestra de pinturas montada junto al hall. También Silvina Bosco —nominada a Mejor Actriz de Reparto por Ojos que no ven— brilla con luz propia con un atuendo azul eléctrico y una sonrisa ancha, que muestra feliz para las fotos de la prensa.  

Se corre el telón

Pasó el tiempo de pronósticos y saludos en el hall. Cuando finalmente se abrieron al público las puertas del Teatro, la antesala se llenó de personalidades de la comunidad teatral entre las que destacaba el secretario de Cultura y Creatividad del Ministerio de Cultura de la Nación, Enrique Avogadro.

Norma Duek, presidenta de la Asociación Amigos del Teatro Nacional Cervantes —entidad organizadora del premio—, dio la bienvenida: “Una vez más el Cervantes se engalana para recibirlos, querida gente de teatro. Realmente, gracias por estar”. La acompañaron en el escenario, Rubens Correa —director general del TNC— y, en representación de los auspiciantes, Enrique Avogadro, por el Ministerio de Cultura de la Nación, y Juan Duarte, consejero de Asuntos Culturales de la Embajada de España.

Tanto Correa, como Avogadro y Duarte tuvieron palabras de agradecimiento, y destacaron la importancia de los premios. El director del TNC también recordó que pronto finaliza su gestión al frente del organismo, y ensayó una suerte de despedida: “Esta es mi última ceremonia de este lado, después estaré sentado por allá, de aquel lado”.

El Secretario de Cultura y Creatividad, por su parte, le agradeció a Rubens y volvió a anunciar el nombramiento de Alejandro Tantanián como director, a partir de enero de 2017. “Es un orgullo una celebración donde la gente de teatro premia a la gente de teatro”, dijo.

Duarte cerró su intervención con el deseo de “fortalecer las relaciones bilaterales entre este teatro y la Embajada de España, a través del sector cultural, y conseguir más presencia de espectáculos y coproducciones entre los dos países”.

Y los nominados son...

Una vez inaugurada la entrega de los María Guerrero, Martin Wullich condujo el timón de la noche. Como ya es un clásico en esta gala de la escena teatral, antes del anuncio de los premiados, se entregaron los diplomas y estatuillas de reconocimiento, las menciones especiales y los premios a la trayectoria.

Las primeras se las llevaron el coreógrafo Mauricio Wainrot, gran figura de la danza contemporánea argentina; el dramaturgo, guionista, director de escena y actor español Miguel del Arco, por las puestas y adaptación de Juicio a una zorra y de La violación de Lucrecia, de Shakespeare; el Teatro Municipal Coliseo Podestá de La Plata, por sus 130 años de existencia, y tres instituciones que hacen todo por la música: Buenos Aires Lírica, Conservatorio Beethoven y Asociación La Bella Música.

La sala Andamio '90 obtuvo una mención especial por sus 25 años de actividad, y los aplausos y aprobaciones del público resonaron cuando los representantes mencionaron “la importancia de resistir al neoliberalismo, razón por la que nació el teatro”.  También se premió al Teatro del Pueblo, que cumplió 85 años.

La Distinción especial Lydé Lisant, que lleva el nombre de la actriz que creó el premio María Guerrero en 1986, fue para Héctor Presa por la dirección del Grupo de Teatro Infantil “La Galera Encantada”. Y los premios a la Trayectoria, este año, rindieron homenaje a Ana María Castel  y a Oscar Barney Finn.

“Uno no vive pensando en una trayectoria, uno hace la trayectoria viviendo”, aseguró Castel. Y dedicó su distinción a su marido y a sus hijos: “Porque nunca saben si les estoy hablando a ellos o estoy pasando letra. Y siempre la pifian: me contestan cuando estoy pasando letra y se callan cuando les hablo”, contó divertida. En el mismo sentido, Barney Finn reflexionó: “Uno es lo que va haciendo y gestando en el camino”.

El Ballet Metropolitano de Buenos Aires se lució con Tangos del Plata, en homenaje a Mariano Mores, y se ganó las palmas de los espectadores.

Los premios Revelación fueron para Juan Manuel Correa, por Puente roto de Pompeyo Audivert y Compañero del alma, de Villanueva Cosse y Adriana Genta; Peter Lanzani, por Equus, de Peter Shaffer; Julián Marcove, por Franz y Albert, de Mario Diament, y Magalí Meliá, por Y... se nos fue redepente, de Niní Marshall, una de las obras preferidas de la noche.

Finalmente, se anunciaron los ansiados María Guerrero. Los ganadores de esta edición fueron: Alejandra Radano, Mejor Actriz Protagónica por Deshonrada de Gonzalo Demaría; Luis Campos, Mejor Actor Protagónico por Ubú rey, versión libre de Andrés Bazzalo sobre la obra de Alfred Jarry; Pilar Boyle, Mejor Actriz de Reparto por Mi hijo sólo camina un poco más lento, de Ivor Martinić; Roberto Romano, Mejor Actor de Reparto por La noche en que Fortimbrás se emborrachó, de Janusz Glowacki; Guillermo Cacace, Mejor Director por Mi hijo sólo camina un poco más lento; Eva Halac, Mejor Autora Argentina por Sánchez Bulevar; Marcelo Valiente, Mejor Escenografía por La noche en que Fortimbrás se emborrachó; Fabián Molina Candela, Mejor Iluminación por Ubú rey; Carlos Di Pasquo, Mejor Vestuario por Y ... se nos fue redepente, de Niní Marshall, y Claudio Peña, Música Original por El Farmer, adaptación de Pompeyo Audivert y Rodrigo de la Serna, sobre la obra de Andrés Rivera.

Textos: Ariana Budasoff

Fotos: Soledad Amarilla